Los baños de muchas casas permanecen igual que hace años… Cuando estaban de moda. Es posible que las instalaciones, e incluso los revestimientos y sanitarios, estén en buen estado; pero seguro que la estética se ha quedado trasnochada y completamente obsoleta.
La solución pasa por una renovación total, pero claro: cualquiera se mete en obras con la que está cayendo. Así que vamos a ver cómo podemos renovar nuestro baño en un fin de semana, con productos a la venta en cualquier centro de bricolaje y sin tener que llamar a albañiles ni pintores. O sea: una reforma exprés en toda regla, y hecha por nosotros.
Primer paso: las paredes
Pintar los azulejos es hoy día posible gracias a los productos especiales de las mejores firmas. En primer lugar, aplicaremos sobre la cerámica una imprimación especial con un rodillo de esmaltar. Y después, ya podemos extender la pintura. Un consejo: no dudéis es pintar las paredes de blanco, porque aumenta la luminosidad y queda muy bien. Si los azulejos originales eran oscuros, podéis tapar alguna cenefa o recuadro con cinta y papel para que luego queden a la vista. Otra opción es empapelar encima de la imprimación: es una opción que también puede quedar bien.
Segundo paso: suelo y muebles
Los suelos se pueden renovar con facilidad gracias a un material revolucionario: lamas plásticas que imitan madera y que son autoadhesivas. Basta con quitarles el papel protector y colocarlas como si fuera un suelo de madera normal, pegadas encima del original. ¿A que es fácil? Para terminar, los muebles de baño agradecerán un cambio de imagen: en lugar de pintarlos, puedes revestir algunas partes (cajones, puertas…) con plástico autoadhesivo de colores. Si cambias los tiradores conseguirás una renovación total.
¿Creéis que lo que os cuento es solo teoría? Pues no dejéis de ver este magnífico vídeo para comprobar el resultado de una renovación total de un baño de los 70. Con las mejores ideas, os lo garantizo…