Decorar con colores pastel


Los colores pastel son una de las tendencias del año tanto en moda como en decoración, ayudando a conseguir ambientes o looks tranquilos y que trasmiten serenidad y calma. En lo que a decoración se refiere, que es el tema que nos ocupa en Decorablog, son perfectos para decorar cualquier estancia y tanto para niños como para adultos. Colores como el rosa palo, verde menta, azul cielo, vainilla o cualquier otro color en su tonalidad más pálida será una apuesta segura en decoración.

Tonalidades suaves con las que conseguirás una decoración perfecta tanto en un dormitorio como en el salón, cocina o cuarto de baño, y que además puedes combinar con casi cualquier otro color o tonalidad, logrando así contrastes muy llamativos y consiguiendo el efecto deseado en cada caso. Lo mejor de estos colores es que puedes combinar prácticamente todas las tonalidades pastel que se te ocurran, consiguiendo así un equilibrio perfecto en cualquier estancia y que difícilmente se puede lograr con tonalidades más vivas.


Los tonos pastel son aquellos colores que utilizan su tonalidad más «pastelosa» o cremosa, la más suave, con lo que podrás utilizar varios en la misma estancia ya que nunca se verá estridente ni estresante. De todas formas, tampoco hay que disparatarse y llenar la habitación de colores ya que hay algunos que no pueden combinar bien y no es cuestión de utilizar toda la gama de pasteles en una misma estancia. De todas formas, sí puedes combinar varios ya que todos te quedarán bien.


Es una elección perfecta para los dormitorios, estancias en las que se necesita más que en ninguna otra conseguir un ambiente relajado y que trasmita calma. Son especialmente perfectos para dormitorios infantiles, sobre todo si los peques todavía son bebés. También es una buena opción para el salón, la cocina o el baño, aunque en estos casos sí puedes combinarlos con tonalidades más vivas para conseguir un contraste más llamativo y original.

Dependiendo de la estancia en la que los vayas a utilizar te irá mejor combinarlos con muebles llamativos o con muebles en colores neutros. Así, en el dormitorio es mejor combinarlos con blancos o madera, mientras que en otras estancias puedes apostar por muebles y textiles en colores más vivos.

Deja una respuesta