Fijaos que idea tan buena, divertida y barata para organizar la ropa en la entrada o la habitación. Se trata de unos divertidos percheros o colgadores, como los queráis llamar, realizados con botes de pintura reciclados y que además de permitiros colgar las prendas de ropa, os proporcionarán espacio extra en su interior para que guardéis otros objetos o prendas.
La idea es bien sencilla: basta con coger un bote de pintura, limpiarlo a fondo (tal vez podáis conseguir botes vacíos y limpios en algún almacén de pinturas) y fijarlo a la pared tal y como os voy a enseñar.
En primer lugar, limpiad bien los botes de metal y retirad las etiquetas con agua caliente o acetona. Si los botes no son bonitos o están deteriorados, podéis pintarlos con pintura en aerosol dorada o plateada. Después, practicad dos agujeros en el fondo de cada bote usando el taladro y una broca de metal. Colocad el bote en el lugar donde queráis colgarlo y marcar con un rotulador los puntos a taladrar en la pared. Los agujeros se deben hacer con el taladro y una broca de widia del diámetro de los tornillos y los tacos a emplear. Una vez hechos los agujeros, introduce en cada uno de ellos un taco de expansión.
Coloca el bote de forma que los agujeros del fondo coincidan con los de la pared. Coge un tornillo y pásale una arandela adecuada, que servirá para hacer tope y que el bote no termine descolgándose. Introduce el tornillo en uno de los agujeros del fondo del bote, de forma que entre también en el de la pared. Apriétalo con un destornillador y coloca el otro tornillo. ¡Listo! Ahora podrás colgar del bote el abrigo, la bufanda o el bolso, y meter dentro de él las llaves, los guantes o las gafas. Y si guardas la tapa, lo que introduzcas en este original “perchero” quedará a buen recaudo…