No me extrañaría que a más de uno le fuera de maravilla el producto que os presento en esta entrada. Para evitar problemas relacionados con la falta de espacio, el diseñador Luke Hart decidió colocar unos estantes que hacen posible la colocación de libros sin la necesidad de tener una estantería que por su estructura tiene que partir desde el suelo hacia arriba.
El producto en cuestión se llama Rubber Shelves y no son más que unos estantes de goma encima de los cuales se pueden depositar objetos que no pesen excesivamente. Lo mejor de todo es que son muy versátiles porque se adaptan al tamaño y a la forma del objeto colocado encima. Están fabricados con silicona y no son precisamente elegantes, aunque no se puede negar que son funcionales y originales a más no poder.
Para más información os recomiendo visitar behance.net y buscarlos por su nombre.