En la decoración del hogar hay multitud de objetos que puedes utilizar para darle diferentes ambientes a tu hogar, siendo muchos de ellos cada vez más originales o inusuales en lo que a usos decorativos se refiere. Seguramente tendrás por casa, o en el trastero, un montón de cosas que, si lo piensas bien, le darían un toque muy especial a tu hogar en lo que a decoración se refiere. Es también probable que tengas unas cuantas cajas, vacías, arrinconadas, metidas en el armario o en el trastero esperando a tener un uso.
Pues bien, hoy te daré unos cuantos consejos para decorar con cajas y que por fin le encuentres utilidad a esas viejas cajas de madera, cartón o cualquier otro material que estás guardando desde hace tiempo sin saber muy bien para qué. Toma nota:
– Para utilizarlas como elementos decorativos te valdrán cajas de madera, de plástico o de cartón, siempre y cuando estén en buenas condiciones y no estén rotas, aunque también es cierto que podrás personalizarlas y cualquier mancha o roto se podrá aprovechar para hacer un diseño original.
– Lo primero que tienes que hacer es limpiar la caja con algo específico para el material del que está hecha y quitarle la tapa.
– A continuación pinta el fondo de la caja del color que tengas en la decoración de tu hogar o de un color que combine para que todos los elementos se fusionen en un único ambiente.
– Coloca un par de ganchos en la parte trasera para poder colgarlas en la pared, ya sea para utilizarlas como cuadros (con un fondo bonito para que queden mejor) o bien como estantería, pudiendo poner varias en diferentes niveles para hacer una composición original.
– Si las vas a utilizar como estantería asegúrate de que soportan el peso que les vas a poner, especialmente si son de cartón, en cuyo caso deberías ponerles un soporte plástico para que puedan con el peso.
– Esta alternativa es muy original si además pones en ellas portavelas, marcos de fotos o cualquier otro elemento decorativo que combine con ellas y que sea ligero para que el ambiente no se vea muy sobrecargado.
Aunque no lo parezca, la estantería de la fotografía está hecha con cajas.