El microcemento es un material muy noble y versátil que permite revestir tanto suelos como paredes. Es especialmente recomendable para obras de reforma, pues permite transformar superficies existentes sin que se tengan que llevar a cabo trabajos alternativos. Además, son muy prácticos y resistentes y forman parte de la decoración más vanguardista. Por ello no es extraño verlo tanto en lofts como en apartamentos minimalistas con su tono gris característico.
Instalación
– Como he comentado anteriormente, el microcemento tiene la particularidad de no dar demasiada faena por el simple hecho de que no hay que remover el pavimento existente (excepto la madera) para colocarlo. Aplicarlo es fácil, limpio y rápido. En un día se pueden cubrir más de 60 metros cuadrados.
– Si el suelo original es de madera hay que retirarlo sí o sí. Esto es porque se trata de un material que se dilata en verano, lo cual puede hacer que el microcemento se resquebraje.
– En lo que a calidad/precio se refiere, el microcemento es una de las opciones más interesantes del mercado. Además, su mantenimiento es mínimo, tan solo hay que aplicar de vez en cuando cera autobrillo para renovar la protección.