El reloj de pared es uno de los productos de decoración que ofrece múltiples posibilidades en el plano decorativo. Es un formato que da vida a las estancias principales de la vivienda: salones, comedores, cocinas, dormitorios, despachos… ¿Cómo integrar un formato original en la estética de la habitación? En Decorablog te damos seis consejos.
1. Un diseño original y llamativo
El reloj, por sí mismo, cumple con una función práctica en la vivienda. Aporta una referencia clara de la hora que es en cada momento. Por ello, se convierte en el recurso ideal para consultar horarios y tiempos. Sin embargo, si deseas potenciar la visibilidad del formato seleccionado, busca un reloj que sea muy original y llamativo. Es decir, un reloj hacia el que diriges la mirada al entrar por la puerta de la estancia.
2. Espacio vacío alrededor del reloj en la pared en la que se enmarca
Es recomendable que el reloj alcance un buen nivel de visibilidad sobre la superficie en la que se integra. ¿Cómo conseguir dicho grado de protagonismo? En ese caso, conviene reforzar el contraste por medio del espacio vacío que se sitúa alrededor del reloj. Es decir, es recomendable que la ornamentación no resulte excesiva en torno a este punto para que toda la atención se dirija, verdaderamente, en ese núcleo.
3. Estilo propio: en conexión con la estética de la estancia
La elección del reloj pone el acento en la importancia de la decoración a través de los accesorios y los complementos. Son piezas que personalizan en detalle las estancias principales de la vivienda.
Por ello, más allá de la perspectiva práctica de un buen reloj de pared, hay que poner el foco en el estilo hasta dar con aquel que encaja perfectamente en el puzle de una estancia con un aire nórdico, industrial, clásico, ecléctico, contemporáneo, vintage…
4. Crea composiciones con otros elementos
Un reloj de pared pone el acento en la decoración de una de las perspectivas más relevantes de la vivienda. Por ello, puedes crear composiciones bonitas con varios diseños similares o, por el contrario, sumar al conjunto otro tipo de productos como, por ejemplo, marcos de fotos.
En ese caso, puedes experimentar diferentes perspectivas como la simetría, la asimetría y la visión de conjunto (todos los ingredientes se integran en un mismo contexto).
5. Un reloj que destaca sobre el fondo
¿En qué pared en concreto puedes situar un reloj dentro de una estancia determinada? Hay un aspecto que es importante atender: el fondo en el que se sitúa el diseño debe destacar su presencia y sus características. Al igual que ocurre con un cuadro, una lámina de naturaleza, un espejo o un marco de fotos, el reloj debe brillar con sencillez sobre el fondo.
6. Alinea la estética del reloj de pared con su función práctica
Es importante que el modelo quede muy enmarcado en el conjunto de la vivienda. La perspectiva visual es relevante cuando se trata de decidir cuál es la mejor posición para integrar dicho complemento. Pero no hay que perder de vista la parte práctica del objeto al que hacemos referencia.
Es decir, ten en cuenta en qué lugares de la vivienda sueles consultar con más frecuencia la hora. Por ejemplo, en la cocina mientras elaboras una nueva receta y sigues los pasos del libro que contiene todas las indicaciones para completar la elaboración. Quizá necesites un reloj de pared en el despacho, en la zona de estudio o en el salón.
Por tanto, un reloj de pared es un producto práctico y decorativo. Un complemento que también se convierte en un buen regalo dentro del ámbito de la decoración del hogar.