Un salón pequeño y con poca luz puede alcanzar su máximo potencial desde el punto de vista estético y funcional con un buen plan de decoración. En Decorablog compartimos siete consejos para realzar la amplitud y la claridad.
1. Techo en blanco o beige: el acabado ideal para salones pequeños
Hay varios factores que inciden en la luminosidad de la habitación. El techo posee una relevancia esencial por su ubicación en el plano del salón: puede iluminar desde lo alto la zona de estar. Para ello, es recomendable pintar la superficie en blanco, en beige o en un tono suave.
2. Espacio libre y despejado cerca de la ventana
La ventana y la puerta de acceso a la estancia son dos puntos estratégicos del salón. Es importante analizar su posición en la estancia para dotar al entorno de la distribución más adecuada. ¿Qué error decorativo interfiere negativamente en el contexto? Evita elegir muebles excesivamente grandes, especialmente, en el área que se sitúa cerca de la ventana. Conviene que ese rincón esté despejado para potenciar el protagonismo del punto focal más relevante: las vistas del exterior y la entrada de luz natural.
3. Sofá de dos plazas para un salón pequeño
Si quieres reforzar la sensación de amplitud en un salón pequeño y con poca luz, un sofá de dos plazas puede convertirse en la solución. Ten en cuenta que sus medidas se adaptan muy bien a un escenario de estas características. Por otra parte, un formato compacto reduce el peso visual del mueble. En consecuencia, no solo tienes la posibilidad de seleccionar asientos en color claro, sino también otros diseños más oscuros.
4. Potencia la continuidad visual en suelo, paredes y techo
Antes de adquirir los muebles para el salón o el comedor, si este se integra en la estancia, conviene planificar la estética del suelo, las paredes y el techo. Pues bien, aunque es posible seleccionar acabados en contraste para cada una de las zonas señaladas, es mejor reforzar la continuidad visual en las partes indicadas. Por ejemplo, un suelo de madera clara combina con paredes y techo en blanco. En definitiva, adopta un enfoque holístico en la planificación de la imagen del entorno.
5. Textiles en su justa medida
Los textiles añaden ese toque de calidez que resulta tan deseado en un salón grande, mediano o pequeño. Es decir, los tejidos suaves, agradables y delicados realzan la sensación de hogar en la estancia. Elementos que también pueden estar muy presentes en una zona de estar con medidas reducidas.
Aunque es mejor evitar el exceso de detalles y los tonos muy oscuros. Por ejemplo, las cortinas finas que dejan pasar la luz se integran muy bien en el conjunto. Los cojines, por su parte, también pueden decorar un sofá de dos plazas. En ese caso, opta por una composición simétrica: sitúa a ambos lados el mismo número de piezas.
6. Almacenaje abierto o muebles sin tiradores en salones pequeños
Una de las tendencias de decoración actual que mejor se adapta a un salón pequeño y con poca luz es el almacenaje abierto. En primer lugar, es una propuesta que reduce el peso visual del mueble (que puede convertirse en un atractivo escaparate que potencia el efecto de los detalles y los adornos en la estancia). ¿Buscas otras propuestas de estilo para vestir tu salón? Los diseños sin tiradores de aire contemporáneo son muy atractivos.
7. Busca el ángulo perfecto para un espejo
¿Cómo decorar un salón pequeño y con poca luz para reforzar la amplitud y la luminosidad en el lugar? Un espejo es una pieza clave. Elige un artículo especial y busca la mejor perspectiva.