Disfrutar de una piscina durante el verano es una experiencia muy refrescante. Sin embargo, conviene señalar que una piscina requiere de un buen cuidado y mantenimiento. Y la cubierta desempeña una importante función. Al elegir un formato específico puedes considerar en qué medida esa propuesta va a mejorar la seguridad, la limpieza y la protección de la superficie disponible.
¿Qué cubierta de piscina comprar?
Elige un diseño que se alinea con el entorno (no solo a nivel estético)
Sin duda, las cubiertas de piscina poseen una funcionalidad que es decisiva en la elección de un producto de calidad. Pero, como ocurre en otros aspectos relacionados con la decoración, la estética también es relevante. En consecuencia, es posible seleccionar un modelo que no interfiere en la imagen del contexto. Al contrario, potencia la belleza y la armonía de un espacio abierto.
Pues bien, es recomendable analizar las condiciones del espacio desde una perspectiva general. Más allá de la imagen, hay otras variables que conviene atender en la práctica. Por ejemplo, las condiciones climáticas de cada estación del año que crean unas circunstancias concretas en el entorno.
Forma, bordes y tamaño de la piscina: aspectos a tener en cuenta
Existen diferentes referencias que puedes integrar en el proceso de búsqueda de una cubierta que reúne las características deseadas. Por una parte, esta debe adaptarse al entorno. Y, también, tiene que alinearse completamente con la forma de la piscina.
Lo más recomendable es solicitar el asesoramiento profesional para acertar plenamente en el diseño seleccionado. Hay que tener en cuenta que su instalación debe cumplir con todas las medidas de seguridad. Por ello, un equipo experto debe ocuparse de la tarea.
Tipos de cubiertas para piscinas
Puedes solicitar información sobre los diferentes diseños disponibles en el mercado. Por ejemplo, las cubiertas bajas se adaptan especialmente a espacios pequeños puesto que su estructura es muy discreta. Una cubierta alta, por su parte, delimita visualmente el entorno que enmarca el área en el que se sitúa la piscina.
Conviene señalar que este tipo de cubierta también ofrece diferentes opciones. Por ejemplo, un diseño fijo destaca por su permanencia, resistencia y estabilidad. Algunas cubiertas telescópicas, por su parte, poseen una particularidad: son diseños móviles.
Sistema de apertura: manual o automático
La cubierta debe ser práctica, cómoda y funcional desde diferentes puntos de vista. Por ejemplo, es recomendable que presente un sistema de apertura que resulte sencillo. De este modo, se simplifica el proceso de abrir o cerrar la cubierta en el momento indicado. Pues bien, existen algunos diseños que requieren de un proceso manual. Sin embargo, es un sector en permanente innovación, por ello, también puedes encontrar otras soluciones que muestran las ventajas de un sistema automático.
Presupuesto: compara diferentes modelos y precios
Como ocurre en la elección de cualquier otro producto para el hogar o el jardín, la compra de un artículo especializado debe ajustarse al presupuesto planificado. Pues bien, el precio de la cubierta de la piscina varía en función de diferentes características. Por esta razón, conviene comparar varios modelos, contando con el asesoramiento especializado, para decidir cuál es aquel que se ajusta a las necesidades del espacio.
Antes de elegir una cubierta define cuál es el objetivo que debe cumplir. Con frecuencia, los clientes seleccionan un diseño específico para proteger la superficie de la piscina durante la temporada de invierno.
Finalmente, ten en cuenta que un modelo de calidad debe complementarse con una instalación profesional que garantiza la seguridad en el entorno. De hecho, además de analizar los factores mencionados en el artículo, para elegir un buen producto también es esencial conocer cuál es el tipo de suelo que se integra en el espacio.