El deseo de tener un jardín en casa se adapta a las condiciones del espacio existente. Este entorno puede situarse en el exterior o, por el contrario, decorar una zona interior. El jardín vertical es una tendencia estética. ¿Cómo integrarlo en la vivienda?
1. Elección del soporte y la estructura
Antes de comenzar a elegir otros ingredientes, es esencial seleccionar la base. Es decir, elige el tipo de estructura que va a dar forma a un pequeño jardín vertical. El soporte seleccionado debe adaptarse a las características del entorno y quedar perfectamente integrado en él. En una tienda especializada en productos de jardinería puedes encontrar una gran variedad de artículos. Una estructura realizada en madera es práctica y decorativa.
Revisa este soporte a lo largo del tiempo para comprobar que no se producen modificaciones significativas en su base. ¿Cómo elegir el formato ideal para las plantas? Este debe adaptarse a las condiciones de la propia pared, por ello, debe ser ligero. Por otra parte, tiene que ser resistente para cumplir con su función básica.
2. Dónde instalar el jardín vertical
Este espacio natural puede situarse en una zona de exterior de la casa, por ejemplo, el jardín o la terraza. Es una propuesta de decoración que embellece espacios de interior (aunque el jardín vertical nunca debe colocarse en una habitación de descanso). Es importante que el contexto reúna las condiciones ideales para el cuidado y mantenimiento de flores y plantas.
Por ejemplo, es esencial que el punto en el que se ubica el jardín vertical reciba una fuente de luz natural durante varias horas al día. Es una de las condiciones que debes analizar para ubicar cada planta en el lugar correspondiente. Dentro de la propia estructura existen zonas que son más sombrías que otras.
3. Cuidado con el peso
Al propio peso de la estructura del jardín vertical se suma la carga de los materiales que componen la zona verde. Todos los materiales están directamente vinculados a la pared en la que se enmarcan. Por ello, es recomendable que el entorno natural no represente un peso excesivo en relación con la propia pared. Comienza con un sencillo objetivo de decoración: crea un pequeño jardín vertical. Disfruta de su cuidado y conservación.
4. Selección de especies para interior o exterior
La ubicación del inmueble es un aspecto que conviene valorar en un proyecto de decoración. Es decir, las variables del lugar en el que se enmarca la vivienda forman parte del contexto en el que se ubica el inmueble. Por ejemplo, el estilo rústico es frecuente en hogares de montaña. Pues bien, enumera una selección de especies de interior o exterior que se adapten a las condiciones del lugar en el que está la casa. Consulta información en una tienda especializada que ofrece sus servicios en la zona. Es importante que los ingredientes elegidos se alineen con las condiciones del clima del lugar.
5. Jardín vertical artificial
Un jardín vertical requiere de cuidado, compromiso y mantenimiento. En caso contrario, las plantas pueden estropearse y perder su belleza como consecuencia de la falta de atención. Sin embargo, no todas las personas se sienten preparadas para llevar a cabo las correspondientes tareas de jardinería (como consecuencia de la falta de experiencia o del desconocimiento).
Pues bien, existe una alternativa de decoración que conviene señalar: el jardín vertical artificial ofrece excelentes resultados desde el punto de vista estético. Recrea perfectamente la belleza de un entorno natural. Un jardín vertical se presenta como la alternativa ideal cuando el hogar no ofrece las condiciones deseadas de luz o riego.
Antes de iniciar el proceso de decoración, define cuál es tu propósito. ¿Por qué quieres crear un jardín vertical en casa?