Los errores de decoración pueden analizarse según el contexto en el que se localizan. Y, sin embargo, existen fallos que se repiten en todas las habitaciones de la casa. De este modo, afectan a la estética del recibidor, el salón, la cocina, el dormitorio o el baño. ¿Cuáles son esas cuestiones que limitan la belleza del look final?
1. Falta de conexión entre los elementos
Las tendencias en decoración y las propuestas en las tiendas del hogar son tan variadas que elegir cuidadosamente los productos indicados no parece sencillo. Por ejemplo, el propietario de un inmueble puede insistir en añadir un complemento que le encanta a pesar de que, objetivamente, no combina con las propiedades de ese espacio. La falta de conexión entre los elementos presentes en una estancia es un error que se repite.
2. Falta de proporción
La falta de proporción puede visualizarse en el exceso de ingredientes que sobrecargan la estancia hasta hacer que parezca más pequeña. Pero también es posible caer en el error de elegir muebles con medidas que no se ajustan perfectamente a los metros cuadrados disponibles. Y, en ese caso, se reducen las zonas de paso que son tan necesarias para que el hogar sea verdaderamente cómodo.
3. Espacios con un aspecto impersonal
La decoración va más allá de la funcionalidad y la estética. Combina ambos ingredientes, pero también está alineada con la personalización de un lugar. De este modo, el interior se pone en conexión con el estilo de vida y la historia personal de quien reside en el inmueble. ¿Y cómo afecta la falta de personalización a una vivienda? En ese caso, la estancia puede destacar por su estilo, combinaciones de colores y materiales utilizados. Pero presenta un aspecto a mejorar: el cuidado de los detalles. Aquellos que tienen un significado emocional.
4. Errores de decoración que realzan todavía más las imperfecciones
La planificación de un proyecto de decoración es clave para dirigir la mirada de forma intencional hacia los aspectos positivos de la vivienda. De este modo, sus fortalezas destacan todavía más. La identificación de un punto focal es determinante para embellecer el interior de una habitación.
Pero existen errores decorativos que producen el efecto contrario. Es decir, consiguen que las imperfecciones sean todavía más visibles en el conjunto. El reflejo de un espejo, por ejemplo, puede poner el acento en un matiz especial o, por el contrario, enmarcar un ángulo menos atractivo. Pero el resultado será muy diferente en cada caso.
5. Colores que afectan negativamente a la iluminación
La luminosidad de una estancia va más allá de su nivel de conexión con el exterior. La luz que entra a través de las ventanas incide positivamente en el interior. Sin embargo, los colores utilizados en la decoración del lugar pueden dar claridad a una estancia o, por el contrario, hacer que parezca más apagada.
6. Exceso de tendencias
Las tendencias de cada temporada son una fuente de inspiración constante. Ofrecen nuevas perspectivas para realzar el estilo del hogar. ¿Pero qué ocurre cuando muchos de los detalles presentes en la estancia dejen de estar de moda dentro de un tiempo? La perspectiva de ese lugar cambiará de forma notable. Las tendencias son muy atractivas porque se perciben con especial intensidad en los escaparates de las tiendas y en los catálogos especializados. Aunque el exceso puede saturar el lugar a largo plazo.
7. Priorizar la estética más allá de la practicidad
Estética y experiencia práctica son dos elementos que embellecen la vivienda cuando están unidos. A pesar de ello, es habitual priorizar la belleza en la elección de algunos de los productos esenciales que forman parte de la composición de la estancia. ¿Pero qué ocurre cuando un producto básico no es verdaderamente cómodo? Su valor disminuye en el día a día.