El veterano diseñador y arquitecto francés Jean Nouvel, nos trae una lámpara de lo más llamativa y atrevida. Se llama Araña y según su creador está basada en la libertad, principio que intentan cumplir a rajatabla en el país galo. Así lo comentaba Nouvel:
Cada uno se convierte en creador de su propio estilo.
Se trata de un producto que comercializa la empresa Troll. Tiene la particularidad de que el consumidor puede configurar la lámpara a su gusto, alargando el cable de una bombilla o haciéndolo más pequeño, todo dependerá de las necesidades y el gusto. Conectada en el techo, desde el centro fluyen unos cables suspendidos que se entrelazan con los otros de forma que parecen las patas de una araña. No apta para personas con fobia a estos simpáticos animalitos.
Las lámparas se pueden escoger en diferentes formas: globo, estándares, blancas, transparentes… todas variando entre ellas. También podemos regular la intensidad de la luz. En fin, una lámpara muy completa y original.