Si la decoración es importante en el hogar, también es un medio de comunicación en una zona de trabajo. En el contexto concreto del despecho, el interiorismo nutre la propia creatividad puesto que existe una relación directa entre el entorno exterior y la vivencia individual del protagonista. Las oficinas cuidadas y bonitas nutren el ingenio, las buenas ideas, la actitud positiva y, por supuesto, al propio equipo. Además, las oficinas también refuerzan la imagen de marca de la propia entidad puesto que los clientes observan ese lugar y extraen una conclusión a partir de aquello que ven. En Decorablog te mostramos una selección de oficinas con mucho encanto en donde las horas tienen una dimensión diferente.
Lugares en donde no solo existe espacio para la concentración, sino también para el descanso. De hecho, aquellos empleados que se sienten felices en su labor diaria son más productivos. A continuación, puedes disfrutar de una selección de lugares que inspiran.
Decoración industrial
Si te encanta esta tendencia de decoración también puedes trasladarla hasta el corazón de tu oficina con la ventaja de que esta corriente con una personalidad tan definida aporta una imagen actual, y además, por un coste competitivo. Un entorno perfectamente adaptado para el trabajo en equipo, el intercambio de ideas, las reuniones profesionales o las sesiones de formación.
Oficina en tonos neutros
La iluminación es una de las características más importantes en la personalización de una zona de trabajo puesto que la luz facilita la visión que es tan determinante en las tareas de lectura y concentración. Sin embargo, puedes incrementar la luz en el espacio de trabajo desde una doble perspectiva. Aprovechando el paso de la luz natural desde el exterior hasta el interior por medio de grandes ventanales, reforzando la amplitud de ese lugar a partir del uso de colores claros y el cristal.
La colorterapia no es un aspecto secundario en este sentido puesto que existe una influencia directa entre las tonalidades y su efecto a nivel anímico. Por ello, conviene seleccionar tonos que refuerzan la capacidad de concentración.
No solo es esencial cuidar los colores, sino también el mobiliario para no crear un espacio recargado sino ordenado. Y, para ello, aunque es fundamental tener una zona de almacenaje, también es aconsejable reforzar la simplicidad. Conviene romper con el estereotipo de un entorno de trabajo gris, apagado y aburrido.
Oficina con tonos rosas
Si el color rosa es uno de tus favoritos, este tono también puede tener protagonismo en una perfecta combinación con el negro como muestra esta oficina con estilo que concede todo el protagonismo al exterior de un paisaje de ensueño que produce un efecto medicinal frente al estrés que surge en el trabajo en el cumplimiento de los plazos con carácter de urgencia.
Por tanto, la estética de un lugar de trabajo no solo se define desde el interior, sino también, desde el exterior. Poder observar una zona verde desde la ventana es un auténtico privilegio que no todas las personas tienen.
Decoración en blanco y madera
La simplicidad del minimalismo adquiere su máxima expresión a través de un binomio que armoniza perfectamente: el blanco y el color madera. No es necesario hacer una gran inversión para decorar un despacho bonito y acogedor en el que apetece estar. Este gasto en decoración es en realidad una inversión que incrementa el salario emocional de quienes forman parte de ese lugar.
Además, en relación con el branding, la renovación de una zona de trabajo también es un plan de marketing con el que conectar con los clientes al transmitir una imagen actual.