Una casa puede ser un proyecto de felicidad personal puesto que esta inversión de tiempo y de dinero da forma a un espacio propio. Ese lugar al que siempre vuelves. Dada la importancia de este proyecto, muchas familias deciden contratar los servicios de un decorador de interiores para emprender este reto. ¿Cuáles son las ventajas de contar con la ayuda de un experto?
1. Conoce el sector en profundidad
El conocimiento es un valor en decoración porque te permite tomar conciencia del amplio catálogo de posibilidades disponibles en cuanto a estilos de decoración, texturas, materiales, conceptos y tendencias. El experto pone este conocimiento al servicio de tu hogar. Por esta razón, te ofrece un asesoramiento constante para dar respuesta a tus preguntas y expectativas.
2. Ver más allá de lo evidente
A partir de la propia experiencia en la creación de espacios que nacen a partir de las posibilidades particulares de cada proyecto, el diseñador de interiores es capaz de observar la capacidad de un lugar de transformarse en su mejor versión en términos de estética y confort, por medio de un plan de acción objetivo, realista y específico. Eso significa que el experto tiene la visión de embellecer un lugar al destacar las potencialidades y al corregir los límites.
Gracias a esta anticipación que te permite observar cuál será el resultado final de tu hogar, podrás ilusionarte en el presente por la alegría de ese instante futuro. Por medio del uso de las nuevas tecnologías, podrás decidir cuál es el proyecto que más te gusta al visualizarlo en el ordenador. Al observar de manera online el proyecto, puedes tomar con un mayor criterio tus decisiones sin el riesgo de arrepentirte después.
3. Estudio de la luz
La luz es un antídoto de bienestar a nivel psicológico puesto que este elemento natural refuerza el sentimiento de la alegría. Un experto en decoración de interiores también conoce las técnicas necesarias para realzar la luz en una casa a través del perfecto uso de los colores por medio de la creación de atractivas combinaciones.
Un profesional puede ayudarte a observar las posibilidades de luz que tiene tu casa. Y esta medida incrementa el bienestsar de forma significativa.
4. Estilo de vida del cliente
Un decorador no solo estudia el hogar desde dentro, también analiza cuáles son las necesidades de la familia durante la convivencia a partir de su estilo de vida. De este modo, gracias a este vínculo interpersonal, el profesional da forma a un hogar que incrementa el nivel de felicidad de las personas que viven en él.
5. Amplio catálogo de proveedores
El experto no solo pone en valor su propio conocimiento y experiencia, sino también, sus contactos. Trabaja con un amplio número de proveedores. Por tanto, esto mejora la gestión del tiempo al elegir a los proveedores adecuados para cada proyecto ya que agiliza todos los trámites del proceso al unir a un equipo de distintas personas en torno a un mismo fin.
Este contacto con una amplia cartera de proveedores no solo es positivo en cuanto al conocimiento de un producto se refiere, el decorador también tiene acceso a un amplio catálogo de precios. Y siempre tomas las decisiones más efectivas desde el respeto constante al presupuesto del cliente. Esto es algo que supone más tiempo para el cliente si se encarga de gestionar este contacto con los proveedores de manera individual.
Este acceso a los distintos proveedores aumenta la creatividad, la originalidad y la personalización del proyecto final gracias a la creación interior de un espacio único y con personalidad.
Todo ello, además, cumpliendo los plazos de tiempo establecidos previamente.