Al dar forma a los distintos espacios de la casa o del lugar de oficina puedes tener en cuenta distintos aspectos. Uno de ellos es la psicología del color. Es decir, el significado asociado a una tonalidad a partir del efecto que este estímulo produce en el estado de ánimo. La decoración es una forma de expresión y cuando una persona se encuentra en un lugar determinado, el entorno apela a su individualidad de manera directa. De este modo, una persona puede sentirse totalmente cómoda en un lugar o tener la sensación contraria.
La psicología del color es un ejemplo de cómo lo humano está presente en las tendencias de diseño de interiores. Por ejemplo, las funcionalidades de un salón son distintas a las de un dormitorio como zona de descanso, por esta razón, los colores principales elegidos para definir cada estancia están especialmente pensados para propiciar una agradable experiencia de confort. Cada color tiene un significado concreto.
Efectos del color en el estado de ánimo
Por ejemplo, el color verde está presente en la naturaleza, por esta razón, esta tonalidad contiene las propiedades terapéuticas que produce el contacto con paisajes naturales. Otro de los colores que también está presente en la naturaleza y que genera un estímulo de belleza a través de la contemplación visual es el azul. Uno de los colores más creativos que también tiene presencia en la decoración es el naranja, un tono que produce un efecto vitamina en el estado de ánimo gracias a su esencia optimista.
Otro de los colores presentes en el universo es el amarillo que queda perfectamente representado por el Sol. Aplicado a la decoración de interiores, esta tonalidad representa la luz.
El color rojo es la metáfora de la pasión. Es un color muy intenso, por esta razón, en caso de integrarlo en una estancia conviene añadir solo unas notas de este tono en contraste con otras opciones de la paleta cromática. El blanco es el símbolo de la pureza y de la armonía, esta es una de las razones por las que su aplicación en cualquier zona de la casa resulta siempre un acierto. El tono que contrasta con el blanco, el negro, es preferible añadirlo solo en pequeñas dosis.
Un color alternativo al negro con matices más suaves es el gris, sinónimo de elegancia. Un color que es perfecto para formar atractivas combinaciones. A través de los colores puedes definir la identidad de tu hogar en términos de sensaciones que conectan con tu modo de ser.
¿Por qué el color es importante en la decoración?
La psicología del color es una disciplina que te permite tomar decisiones de manera proactiva pensando en tu bienestar. Tu estado de ánimo no es lineal durante todos los días del año. Sin embargo, la decoración como elemento permanente de tu hogar se convierte en un medio que te produce un mensaje emocional.
La casa es uno de los lugares en los que más horas vas a estar a lo largo de la vida, por esta razón, es importante que al tomar tus decisiones pongas una atención especial en cómo te sientes ante la reacción de determinado color. A través de la psicología del color puedes reforzar la creatividad, pero también, intensificar la emotividad al contemplar el trasfondo emocional que existe en aquellas decisiones que tienen que ver con el diseño de interiores.
Por tanto, a través de este viaje cromático también puedes reforzar tu nivel de introspección al conocerte mejor a ti mismo conectando con el presente por medio del sentido de la vista que es aquel que aporta significado a la psicología del color.