Si, como yo, eres un enamorado del estilo escandinavo en la decoración tal vez te apetezca darle pequeños toques a tu vivienda que recuerden a los interiores de los hogares de los países del norte de Europa. Conseguirlo es sencillo si sigues unas pautas, y hoy quiero centrarme en el salón, por ser una de las estancias donde más tiempo pasamos y una de las que más posibilidades presenta. A continuación vamos a ver algunas ideas para imprimir ese toque nórdico a esta habitación. ¡Te toca a ti ponerlas en práctica!
El sofá
Como en cualquier otro salón, el sofá es el punto focal de la estancia. Si tienes sitio suficiente apuesta por uno grande y cómodo. ¿Qué te parece con chaise longue? Puedes ponerlo en un color oscuro que resalte sobre el fondo blanco habitual que tienen las habitaciones decoradas con estilo nórdico.
Mesas auxiliares
Un mueble que no puede faltar en tu salón escandinavo son las mesitas auxiliares. Mis favoritas son las redondas blancas con patas de madera, y también me encantan las que tienen la base metálica, como si fuera un cesto. Tienes muchas posibilidades, pero utilizando estos dos materiales (metal y/o madera) acertarás seguro.
Los textiles
Los textiles se convierten en otro de los básicos de la decoración nórdica. Al tener esas reminiscencias hacia países donde hace mucho frío siempre va a quedar muy bien que coloques una alfombra gordita en el suelo o una manta de pelo o de lana sobre el sofá o en una butaca. En cuanto al color, puedes optar por tonos claros para que sigan creando ese ambiente tan relajante y sereno o darle un toque de color con los cojines, por ejemplo.
Un toque natural a través de las plantas
No puede faltar esa pincelada natural que aportan las planta. En los salones decorados de esta forma las de hoja verde quedan de maravilla. Le dan un poco de color a la estancia al mismo tiempo que le imprimen ese carácter especial que hace que nos encontremos ante un lugar siempre acogedor. Puedes poner una grande o varias pequeñas, o hacer combinaciones con varias de ellas… Si prefieres flores, las orquídeas son ideales para este tipo de decoración.
Otros elementos decorativos que no pueden faltar
En un salón con decoración escandinava los cuadros también quedan de maravilla. Puedes elegir marcos de madera clara, por ejemplo, con láminas de temática nórdica, en tonos suaves o con algo de color para que, de nuevo, se creen contrastes muy interesantes. Recuerda que si vas a hacer combinaciones con varios elementos deberás en tener en cuenta las tonalidades, ya que se trata de un estilo equilibrado y sin estridencias. Las lámparas nórdicas también son imprescindibles en los salones, ya que le dan un toque muy personal. Puedes optar por lámparas de pie, más pequeñas en algún rincón especial y también por iluminación general en el techo. ¿Y qué me dices de las guirnaldas? ¡Me encantan para el salón escandinavo!
Los mejores materiales para tu salón
Ya te lo he adelantado antes. La madera y el metal son los materiales indispensables para tu salón nórdico. Los puedes emplear en los muebles y accesorios, también en el suelo y paredes en el caso de la madera, que deberá ser clarita para mantener esa decoración luminosa propia de este estilo decorativo.
Las formas
En cuanto a las formas, quedan maravillosas las líneas rectas y hasta con cierto estilo geométrico. Por ejemplo puedes poner láminas que incluyan este tipo de dibujos que también puedes introducir en los textiles. Las formas geométricas quedan igualmente chulísimas en los jarrones o en figuras de animales colgadas en la pared.