Tu casa es tu espacio personal. Por tanto, cualquier estilo decorativo es interpretado desde tu propio punto de vista y tu experiencia. El objetivo de personalizar un espacio implica hacerlo verdaderamente propio. Y puede ocurrir que te encanten algunos aspectos de aquel estilo que has decidido priorizar en tu casa, sin embargo, existe algún factor con el que no te sientes tan identificado. No se trata de tomar una decisión desde la referencia “todo o nada”. Utiliza aquellos ingredientes que te gustan y crea un espacio que evoque la alegría de un proyecto de vida. En Decorablog te damos algunas ideas para personalizar un estilo de decoración.
1. Prioriza las ideas que más te gustan
Continuando con esta argumentación, analiza cuáles son aquellos detalles que quieres trasladar a tu hogar, y potencia tu creatividad a partir de dichos factores. Diferencia entre aquellas propuestas que sí te gustan de un estilo y otras opciones que prefieres dejar en un segundo plano. Es decir, investiga un diseño para conocerlo mejor.
2. Alimenta la agradable sensación de estar en casa
Puedes observar un espacio desde distintas perspectivas. Por ejemplo, escucha tu sentimiento y cómo te hace sentir un lugar. ¿Qué estilo es aquel que, según tu punto de vista, es sinónimo de hogar? La respuesta de cada persona dependerá de distintos factores, entre ellos, la propia memoria de aquellos recuerdos vinculados a su infancia o adolescencia.
3. Mezcla estilos
En ocasiones, el dueño de un inmueble no desea limitar su creatividad a una única inspiración decorativa. Quiere dar forma a un universo ecléctico que potencia la personalidad de un espacio con distintos colores, matices, texturas y formas. Los contrastes son habituales en un escenario con una visión ecléctica. Pero el resultado de esta composición no es fruto de la improvisación, sino que cada artículo tiene un sentido.
4. Presupuesto
En el mercado encontrarás productos del hogar de precios diferentes. El objetivo de personalizar un estilo de decoración no está condicionado por el coste. Si quieres ahorrar dinero en esta experiencia decorativa, busca piezas lowcost con estilo y funcionalidad.
5. Cuántas personas viven en este hogar
Para personalizar un estilo de decoración, también conviene tener en cuenta cuántas personas viven en dicho hogar. El espacio será un reflejo de las expectativas de cada protagonista.
De este modo, la vivienda refleja la armonía entre espacios compartidos y mundos propios. Al personalizar la decoración de la habitación infantil, por ejemplo, puedes observar más allá del límite visual de la pared para crear un nuevo universo sobre esta superficie.
6. Cultura
La cultura adquiere vida propia en la decoración del hogar desde distintos puntos de vista. Por ejemplo, personalizas un hogar cuando decoras con recuerdos de algunos de tus viajes. Tu biblioteca da la bienvenida a aquellos autores con los que has dialogado a través de sus obras. Los cuadros personalizan las paredes con el arte de distintos artistas.
Existen múltiples detalles que hablan de ti y de aquellas referencias que forman parte de tu biografía.
7. Significado emocional de los objetos que decoran la casa
La búsqueda de la felicidad no solo forma parte del viaje de la vida, sino también del propio proceso de decoración. Sentirte bien en casa es una meta muy apetecible. Pero, para poner el acento en la decoración emocional, es recomendable que no solo analices la funcionalidad o la estética de los artículos. ¿Qué significado tienen para ti algunas de las piezas que ocupan un lugar especial en tu casa? Por ejemplo, un mueble heredado te vincula con el legado de un vínculo familiar. Y, a través de este símbolo visual, el pasado se hace presente en casa.