Generalmente, la reforma de un baño pequeño muestra un antes y un después que sorprende por su espectacular cambio. Sin embargo, el proceso también puede quedar condicionado por fallos y errores que se repiten con frecuencia en este ámbito del hogar. En Decorablog compartimos cinco ejemplos.
1. Renunciar a los tonos oscuros
Los colores suaves inciden en la iluminación y la profundidad. Pero las tonalidades más oscuras también tienen espacio en las reformas de baños pequeños que integran esta perspectiva cromática para añadir matices, contrastes y dinamismo.
Es decir, el análisis del color no solo puede centrarse en la combinación elegida para vestir el espacio, sino también en la relación que existe entre los ingredientes utilizados. ¿Cuál será el protagonista principal? ¿Y qué elemento tendrá una menor presencia?
2. Cuidado con la puerta de entrada
El análisis del espacio debe ir más allá de sus medidas. La perspectiva del entorno cambia en función de la distribución elegida. Y para decidirla, es recomendable tener en cuenta dónde se encuentra la puerta de entrada. Del mismo modo, es esencial que esta pueda moverse con facilidad, sin chocar con ningún obstáculo.
3. Olvidar que el espejo puede marcar la diferencia
El espejo es un complemento básico y esencial. Es una pieza muy práctica. Hay una gran oferta de diseños con varios tamaños y formas. Sin embargo, es un error olvidar que el espejo puede marcar la diferencia en el look final de un baño pequeño.
Aunque la búsqueda de la proporción es clave en la compra de un mobiliario que se adapta a la superficie disponible, un espejo grande no rompe la armonía de un cuarto que no es muy amplio. También puedes elegir un diseño sin marco o un formato con luz. Los espejos redondos, no solo están de moda, sino que embellecen un espacio pequeño.
4. No resolver dudas concretas tras recibir un presupuesto
Es importante solicitar más de un presupuesto para emprender la reforma del baño con un cálculo aproximado del coste definitivo. El documento debe presentar la información de manera detallada en torno a aquello que incluye el proceso.
Aunque los puntos principales estén claramente indicados en el presupuesto, pueden surgir dudas al respecto. Ese hecho puede potenciar la comunicación con el equipo profesional que ha realizado la propuesta. Es un error no tomar la iniciativa de hacer preguntas concretas si existe algún tipo de confusión respecto a los datos disponibles.
5. No concretar las necesidades de almacenaje
El almacenaje es un ingrediente que suele estar integrado en la reforma de un baño pequeño. Pero este no debe evaluarse como un aspecto general, sino como una variable que se alinea verdaderamente con las necesidades personales.
Es decir, es recomendable que elijas muebles que, además de estéticos, son muy prácticos desde tu punto de vista. Por ejemplo, aunque el almacenamiento abierto está de moda, tal vez no se adapte al tipo de espacio que quieras crear tras la reforma.
6. Un punto focal poco atractivo
La imagen general que se percibe desde la puerta del baño adquiere una visibilidad importante en una reforma. Conviene centrar la atención en una perspectiva bonita como, por ejemplo, el espejo.
Es aconsejable que los elementos menos estéticos pasen más desapercibidos en el conjunto de la estancia. Es un criterio que puedes aplicar si quieres integrar la lavadora en un baño pequeño. Pero también es un error que el váter sea uno de los elementos que adquiere un mayor protagonismo en la primera impresión que se percibe desde la puerta.
La reforma de un baño pequeño es un proyecto muy importante a nivel estético y funcional. Por ello, conviene evitar aquellos errores que afectan al resultado final.