Si estás pensando en renovar la decoración de la habitación de los niños, en Decorablog te presentamos algunas buenas ideas que pueden ayudarte a conseguirlo.
El hábitat familiar influye en el crecimiento y en el desarrollo de nuestros hijos. Por eso debemos asegurarnos de que los más pequeños de la casa crecen sanos, felices y en un entorno que estimula su imaginación y su inteligencia. Por ello, te proponemos 10 fabulosas ideas para decorar las paredes de la habitación infantil. ¡Hora de estrenar decoración!
El techo también
Cuando pintamos una habitación, siempre nos olvidamos del techo. La tendencia es dar protagonismo a las paredes, dejando a un lado el techo. Sin embargo, si tu habitación es grande y tienes suficiente espacio, puedes pintar el techo de algún color diferente y llamativo que contraste con las paredes.
Es decir, unas paredes en tonos claros y minimalistas, frente a un techo más intenso. Un toque diferente y creativo que tiene mucho éxito sobre todo en habitaciones grandes y luminosas. Eso sí, asegúrate de que el color del techo combina con el resto de la decoración, desde los textiles hasta el tono de los muebles.
Vinilos y dibujos
Los vinilos y dibujos decorativos para alegrar las paredes de la habitación de los niños es otra gran idea. Puedes adaptar este diseño a los gustos e intereses de tus hijos. Sin duda, una gran idea para personalizar la habitación de los más jóvenes.
Un zócalo
Pero si buscas una decoración que resista en perfectas condiciones durante más tiempo, nuestro consejo es que coloques un zócalo que nos ayude a proteger y decorar las habitaciones infantiles. Una buena idea puede ser pintar el zócalo de algún color sufrido como el topo que es versátil, atemporal y elegante.
Contraste de color
Otra gran idea para pintar las paredes de una habitación infantil es buscar el contraste cromático. Por ejemplo, podemos decorar en azul y blanco para vestir las habitaciones con creatividad.
Y en este sentido, debemos tener presente la distribución cromática. Es decir, debemos escoger los colores que vamos a utilizar para decorar. Y además, tenemos que pensar cómo distribuir estos colores. Cuál de ellos será el protagonista y cuáles serán secundarios.
Una buena idea puede ser pintar las paredes en color azul que podemos combinar con muebles de color blanco. Una distribución interesante, donde el equilibrio cromático adquiere un papel protagonista.
Colores atemporales
Pero antes de pintar las paredes de la habitación infantil, debemos tener en cuenta cuál es la tonalidad más adecuada. Los niños crecen muy rápido, por lo que en unos años esos colores tal vez resulten demasiado infantiles.
En este sentido, tonalidades más atemporales como el azul, el naranja y el verde pueden ser soluciones interesantes. Y si por ejemplo el rosa te parece demasiado infantil, puedes optar por decorar la habitación de la niña en un elegante color violeta.
Pero si buscas algo más clásico, nada mejor que decorar la habitación infantil en tonos neutros como el beige y el blanco. Son colores clásicos que aportan calma, luminosidad y que además no pasan de moda.
Y si estos colores te parecen demasiado relajantes y aburridos, siempre puedes poner el toque de color con algún rojo pasión que alegre una habitación en tonos tierra.
En general, los expertos nos recomiendan optar por tonalidades neutras como el topo que resisten el paso del tiempo. El broche final viene a cargo de los complementos en tonos llamativos que nos ayudan a ganar creatividad en las habitaciones. La ventaja es que renovar los accesorios y textiles resulta mucho más fácil y económico que actualizar la pintura de las paredes.
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