La etapa académica tiene un reflejo en la decoración del hogar mediante la creación de un espacio en casa específicamente diseñado para potenciar la concentración en los objetivos de aprendizaje. La utilidad de esta zona de estudio va más allá del ciclo académico y también puede prolongarse durante las vacaciones. ¿Cómo decorar este lugar?
1. Lámparas de escritorio
La iluminación de la mesa de estudio es especialmente importante para cuidar la visión durante el tiempo de lectura que potencia la comprensión lectora del contenido del objeto de estudio. Por esta misma razón, es recomendable colocar el escritorio en un lugar próximo a la ventana que no solo aporta una fuente de iluminación natural, sino también, una perspectiva del paisaje exterior.
El plan de iluminación es muy importante en esta zona de estudio. Un complemento básico es la elección de una lámpara de escritorio que el estudiante puede encender en distintos momentos dependiendo del horario. Una lámpara que alumbra directamente el libro. Por tanto, al decorar la zona de estudio es recomendable que estés atento a esta cuestión.
2. Creatividad
El estudio es una clara expresión de creatividad ya que el aprendizaje amplía la visión de quien añade nueva información en torno a distintas materias. El lenguaje de la decoración puede comunicar este mismo ingrediente mediante la creación de un lugar que es una metáfora de la expresión creativa de quien evoluciona desde la constancia en la conexión con el objetivo.
Por ejemplo, lejos de interpretar una zona de estudio desde una imagen lineal que puede resultar rutinaria en relación con la decoración previsible, conviene dar a este lugar el propio toque personal por su vinculación con el protagonista que vivirá ese espacio en tantos momentos del calendario.
3. La influencia del color en la concentración
Al decorar cualquier lugar de la casa conviene analizar cuál será el color o la combinación principal de esta estancia poniendo la atención no solo en el factor estético, sino también en la funcionalidad. Este espacio de estudio está acompañado por la constancia en el repaso, la superación de las dificultades en la comprensión de los contenidos más difíciles y la motivación por superar nuevos logros de estudio.
Por ello, al seleccionar el color que es protagonista de este escenario conviene partir del contexto situacional de la rutina del estudiante. Por tanto, es posible crear una zona de estudio en un color que alimenta esta concentración.
4. Comodidad
Los detalles seleccionados para decorar la zona de estudio deben poner la atención principal a esta necesidad que motiva la preparación de esta zona. La imagen de esta zona de estudio puede observarse desde el punto de vista visual por su vinculación con el color, el mobiliario y la distribución de los distintos elementos. Pero además de esta imagen, la vivencia que produce el encuentro con el estudio en un lugar cómodo y práctico refuerza la motivación en este objetivo. Una comodidad que depende, principalmente, de la elección de una mesa de estudio y una silla que tienen esta característica.
El espacio de almacenaje también es importante para potenciar el orden en esta zona de estudio. A su vez, el mantenimiento del orden en el lugar favorece la predisposición optimista hacia la ocupación del tiempo de estudio marcado en la planificación de la agenda del estudiante.
Por tanto, la decoración de una zona de estudio es una inversión en la propia felicidad ya que al igual que un profesional que trabaja en una oficina que le gusta observa este aspecto como una cuestión positiva de su rutina, el mismo ejemplo puede aplicarse al caso concreto de la vida académica.