Existen pequeños cambios de la decoración del hogar, que en la práctica producen una evidente transformación. Por ello, el proceso de embellecer la casa no termina nunca. Cambia tu situación personal, tus prioridades, tus gustos y otros muchos factores que influyen en ese espacio que está tan vinculado con tu propia vida. Realizar posibles mejoras es uno de los objetivos que puede acompañarte durante este año. En Decorablog te damos cuatro consejos básicos para llevar a cabo este plan de acción.
1. Cuál es el presupuesto destinado a este fin
La expectativa del cambio debe adaptarse a la viabilidad de lo posible. Y existe un dato que contextualiza aquello que es realista en el corto plazo: el presupuesto. De este modo, puedes calcular la inversión que vas a destinar a este fin. Puedes optar por minimizar el gasto para priorizar mejoras que sean muy económicas. Es posible lograr este objetivo, incluso, sin gastar dinero. Por ejemplo, cambiar los muebles de sitio consigue redecorar un ambiente.
Además, puedes aprovechar el periodo de rebajas y los descuentos de otras etapas del año para adquirir productos de calidad por un coste más asequible. De este modo, ahorras dinero en este objetivo.
2. Dónde quieres realizar las mejoras en tu hogar
Tu casa tiene distintas estancias, por tanto, identifica qué habitación será la protagonista de este cambio en un primer lugar. Existen distintos criterios prácticos para establecer un orden de prioridades en este guion. Por ejemplo, tal vez desees comenzar con una estancia compartida como el salón o la cocina. O, por el contrario, sea más urgente redecorar un dormitorio.
Existen estancias de la casa que, con frecuencia, son las grandes olvidadas: el recibidor y el pasillo son dos ejemplos de ello. Zonas de tránsito que, en realidad, son más que un lugar de paso. Por tanto, tal vez quieras contextualizar los cambios en esta entrada al hogar que produce una primera impresión.
En definitiva, analiza cuáles son las motivaciones de esta decisión. A su vez, intenta poner en perspectiva cómo un cambio en un lugar concreto rejuvenece de forma significativa el inmueble. Una reforma en la cocina o en el baño tiene un importante valor en un domicilio que presenta un precio más alto si se pone a la venta o en alquiler.
3. Estilo decorativo de la casa
Las decisiones que tomes para mejorar la decoración de tu hogar surgen en un contexto que ya está condicionado por un estilo decorativo o un mobiliario principal. Los pequeños cambios no lo transforman todo, sino que se llevan a cabo sobre una base previa. De este modo, puedes alinear estas novedades con las características de un lugar en el que quieres realzar sus fortalezas y su belleza. Si tienes una casa con un estilo nórdico, añade elementos que armonicen con la luz de esta línea decorativa.
4. Reinventa la decoración de tu hogar a partir de ahora
La forma en la que observas tu casa está muy condicionada por la mirada de la costumbre. Te sientes familiarizado con ese escenario que es una zona de confort para ti. Pero además de analizar tu hogar en su imagen actual, puedes imaginarlo por cómo puede llegar a ser.
Y esa inspiración es una motivación para implementar cambios sencillos en un lugar tan versátil. Busca nuevas perspectivas para dar a cada pieza el mejor ángulo. Un cuadro, por ejemplo, se percibe de forma distinta en función de su ubicación en el espacio.
Si vives acompañado por tu familia, comparte este proceso de redecorar la casa como una misión de equipo. Una misión que fortalece el bien común porque estas mejoras producen felicidad.