Al decorar cualquier estancia del hogar primero debemos centrar nuestra atención en los muebles y el color de las paredes, dejando la elección de los complementos y detalles decorativos para el final. Eso sí, que dejemos este aspecto para lo último no significa que no sea importante. De hecho, gracias a este tipo de elementos lograremos personalizar el espacio y concretar el estilo decorativo. Además, ya sabes que un espacio sin adornos suele ser bastante aburrido, a no ser que apuestes por el estilo minimalista, en cuyo caso también tendrás que añadir algunos detalles decorativos, aunque en menor medida.
Si hay unas zonas del hogar que no deberás olvidar a la hora de personalizar el espacio, éstas son las paredes, que no deberían quedar vacías, al menos no todas ellas. Para aportar un toque de diseño a las habitaciones puedes recurrir a los cuadros y los lienzos, aunque, en general, estos suelen tener un precio bastante elevado. Por eso, cada vez es más la gente que apuesta por las láminas, una solución económica y eficaz para decorar cualquier espacio. Eso sí, si te decantas por esta opción, será mejor que le eches un vistazo a nuestros siguientes 10 consejos para decorar con láminas.
Cuidado con las medidas
Lo primero que queremos recomendarte es que tengas muy en cuenta las medidas. La mejor opción para saber si la lámina va a quedar bien en un lugar en concreto es probarla. Para ello, puedes recurrir a alguien que te aguante la lámina en el lugar donde quieras ponerla y hacer una foto. Así, sabrás si queda grande, pequeña o perfecta.
Composición de láminas
Aunque siempre puedes optar por colocar una única lamina en la pared, cada vez se llevan más las composiciones. Si te decantas por esta opción y se trata de láminas de diferentes tamaños, es importante que no las alinees por el extremo superior o inferior, sino que crees una línea horizontal imaginaria que actúe como centro. Eso sí, si se trata de láminas del mismo tamaño, también puedes situarlas de forma simétrica.
A la altura adecuada
Si te decantas por colocar una única lámina en la pared, tendrás que procurar que ésta se encuentre a la altura adecuada. La mayoría de expertos coinciden que el centro de la obra debe estar ligeramente por encima del nivel de los ojos.
Pega la lamina sobre una superficie dura
Aunque puedes pegar la lámina directamente sobre la pared o algún mueble, es bastante aconsejable pegarla primero sobre un cartón para que esté más firme. Si no lo haces, es muy probable que la hoja se doble.
Papel fotográfico
Aunque podrás comprar láminas en casi cualquier tienda de decoración, también podrás hacerte con diseños increíbles sin moverte de casa. Eso sí, si vas a imprimir una lámina de Internet, te recomendamos utilizar un papel fotográfico o de ilustración. De esta manera, la lámina se verá más gruesa y brillante.
Cinta adhesiva de doble cara
Una interesante forma de colgar las láminas sin que queden agujeros en la pared es utilizar cinta adhesiva de doble cara. Lo único que tienes que hacer es colocar trozos de cinta pequeños en las esquinas y en el centro del marco. Eso sí, debes tener en cuenta que, cuando quites la lámina, la cinta puede llevarse un poco de pintura, así que lo más probable es que tengas que volver a pintar. Eso sí, también puedes colocar otra lámina o cuadro encima para disimular.
Silicona
Otra buena idea para colgar láminas sin que queden agujeros en la pared es pegarlas con silicona. Puedes optar por la típica silicona que se utiliza para todo tipo de manualidades. Para que te sea más fácil, puedes aplicarla mediante una pistola encoladora, aunque con unas pocas gotas será suficiente para que la lámina quede fija en la pared. De hecho, será muy complicado que se caiga si no pones de tú parte.
Vinilo
Un truco muy efectivo es forrar la lámina con vinilo para que quede directamente pegada a la pared. Para ello, deberás sujetar la lámina en cuestión ligeramente y aplicar el pepel adhesivo de vinilo encima. Eso sí, es importante que tengas mucho cuidado de que no queden burbujas. Gracias a esta técnica, tu lámina quedará protegida del polvo y de los efectos de la luz. Así, te recomendamos utilizarla para láminas que tengan mucho valor para ti. Podrás encontrar este tipo de papel en tiendas especializadas. Por si no lo sabías, recibe el nombre de Aironfix.
Marcos
Por supuesto, también puedes optar por enmarcar tus láminas, si bien es cierto es que esta alternativa es algo más cara, ya que además de comprar la lámina tendrás que invertir en el marco. Eso sí, gracias a este elemento una lámina neutra puede destacar. Además, de esta manera tendrás más posibilidades a la hora de colocarlas. Y es que más allá de colgar las láminas en la pared, podrás dejarlas en el suelo o apoyarlas en un mueble: una cómoda, un estante, un aparador, el recibidor…
Apuesta por láminas inspiradoras
Las láminas de paisajes son tendencia, pero lo cierto es que aún están más de moda las inspiradoras. Nos estamos refiriendo a aquellas que incluyen palabras y frases que nos suben el ánimo. Las más habituales son las láminas en blanco y negro, aunque también podrás encontrar en el mercado propuestas más coloridas. Y aunque pueden quedar geniales en cualquier estancia del hogar, te recomendamos usarlas en espacio donde necesites algo de inspiración como la cocina o el despacho.