Alfombra de bolas de fieltro

Haciendo un repaso por las últimas tendencias decorativas en materia de muebles, complementos, accesorios, etc., creo que hay determinadas piezas que tienen una potencia decorativa increíble, como las alfombras hechas con bolas de fieltro.

La mayoría de las que he visto son multicolores, y quizás es eso precisamente lo que las hace tan vistosas, aunque también pueden llevar una sola gama de color. Si os gustan y queréis una de estas alfombras para vuestra casa, están a la venta en varias tiendas de decoración… Aunque también podéis hacerlas vosotros mismos. Os cuento cómo.

Hazla tú mismo

Hacer uno mismo una alfombra de bolas de fieltro no es demasiado complicado, aunque, eso sí, requiere de grandes dosis de paciencia y trabajo. Lo laborioso del proceso es fabricar bolas y bolas de fieltro. Hace unos días os explicábamos cómo decorar el árbol de Navidad con bellotas de fieltro. En ese post os contaba el procedimiento para hacer las bolas.

Si, después de saber esto, aún estáis decididos a llevar adelante el proyecto, armaros de paciencia y poneos a hacer bolas como locos. Solamente cuando tengáis las bolas suficientes, tendréis que acometer el segundo paso del trabajo: unirlas para componer la alfombra.

Lana, agua y jabón

Necesitaréis lana de los colores que más os gusten, jabón de fregar los platos, aguja e hilo grueso. Para hacer las bolas, podéis consultar el post del que os hablaba antes, pero básicamente se trata de mojar las fibras de lana con agua jabonosa y darle forma redonda con las manos.

Una vez tengáis todas las bolas (según el tamaño deseado para la alfombra), llega el momento de unirlas entre sí. La mejor manera de hacerlo es atravesarlas con una aguja e hilo fuerte, y después ir disponiéndolas de la forma deseada (depende de si la alfombra es redonda o cuadrada). Por último, y para evitar caídas, es aconsejable que pongáis por la parte posterior algún material antideslizante.