Con la llegada del buen tiempo tenemos ganas de aprovechar los espacios exteriores del hogar, como es el caso de la terraza o el patio. Las posibilidades son múltiples a nivel decorativo, e incluso puedes modificar por completo el suelo añadiendo césped artificial.
Se trata de una solución cada vez más económica que nos permite disfrutar de las ventajas del césped natural sin tener que llevar a cabo un mantenimiento exigente. Por eso conviene conocer los tipos de césped artificial que existen antes de tomar una decisión de compra.
Césped artificial funcional
Es un tipo de césped artificial que vemos en terrazas, balcones y áticos, pero también en los típicos stands de marcas comerciales que ofrecen sus productos en ferias y salones. La altura del pelo suele oscilar entre los 5 y los 9 milímetros, y hay que tener en cuenta que no todos son capaces de drenar. Los que sí pueden hacerlo ofrecen un drenaje que normalmente ronda los 30 litros por minuto y metro cuadrado, lo cual no está nada mal. Suele ser de un color y destaca por ser bastante barato.
Césped artificial decorativo
Este césped artificial guarda alguna que otra diferencia con el funcional. Se utiliza en terrazas, balcones, áticos, jardines y complejos deportivos porque la altura del pelo oscila entre los 20 y los 40 milímetros. En este caso el drenaje es de unos 60 litros por minuto y metro cuadrado, mientras que a nivel cromático hay más posibilidades porque venden modelos bicolor y hasta con tres colores. ¿La principal ventaja? Que imita muy bien al césped natural y tiene un tacto muy agradable. De hecho, cuando lo pisas tienes la sensación de estar pisando césped artificial.
Ventajas indiscutibles
A nadie se le escapa que el césped artificial ofrece muchas ventajas. Para empezar, puedes decidirte por uno de los dos formatos en los que se suele vender: bobina al corte o rollos precortados. También hay que hablar de lo económico y resistente que es, ya que soporta los rayos UVA, las heladas y el cloro del agua de una piscina. Y no solo eso, sino que no requiere mantenimiento y no produce alergias. Te olvidas de regarlo y sabes que su vida útil es muy prolongada.
Artículo recomendado: Césped artificial para el jardín y la terraza