El estilo de transición es una de las propuestas que triunfa actualmente en la decoración del hogar. En ocasiones, no es fácil encontrar un diseño que se alinee completamente con los gustos personales. Por ello, es habitual combinar tendencias o dar un toque ecléctico al hogar. Pues bien, existe otra alternativa que puede inspirarte si deseas fusionar la tradición y la modernidad en el interior de tu casa. ¿Cuáles son las características del estilo de transición?
1. La atemporalidad permanece más allá de cualquier cambio
Ten en cuenta que es una propuesta que evoluciona a partir de una base tradicional. Los detalles clásicos realzan la atemporalidad en salones, dormitorios, cocinas y comedores.
2. Un toque contemporáneo y elegante
Los matices opuestos se complementan en un espacio que se enriquece desde la atención al detalle. Las líneas clásicas se reinterpretan porque se completan con otras propuestas de esencia contemporánea. Por ello, las formas rectas se integran perfectamente en un proyecto de decoración que reúne el encanto de lo clásico con otros acentos más modernos.
3. Muebles clásicos y actuales
Cualquier hogar debe analizar las necesidades que debe cubrir el espacio. El orden, la organización y el almacenaje dan la estructura deseada a las diferentes estancias. De este modo, la planificación eleva el orden visual que es una expresión de belleza. El mobiliario que caracteriza a una vivienda con un diseño de transición pone el acento en el contraste. Las propuestas más clásicas, de hecho, se completan con otras piezas más modernas. En definida, la estética del hogar representa un viaje en el tiempo con detalles que evocan el pasado y otras tendencias que son pura actualidad. La fusión de todas las propuestas realza el gusto por la atemporalidad.
4. Entorno práctico y cómodo
La búsqueda de la atemporalidad es una de las premisas que inspira el estilo al que hacemos referencia en el artículo. La practicidad es otra prioridad esencial. La imagen de una estancia con una estética de transición llama la atención por ser un espacio muy vivido. Por ello, la elección del mobiliario, los complementos, los textiles y los accesorios unifica la belleza con la practicidad.
5. Búsqueda de la innovación
La base tradicional está presente en un proyecto de este tipo. Sin embargo, su esencia se reinterpreta desde una nueva mirada que fusiona el presente y el pasado. El desarrollo de la innovación se alinea, por otra parte, con el equilibrio. Ten en cuenta que la mezcla llevada a cabo realza la importancia de la armonía.
6. Colores que destacan sobre una base neutra
Los acentos cromáticos se incorporan por medio de la elección de los accesorios. De este modo, los complementos destacan todavía más sobre un fondo claro que, por otra parte, es muy versátil. Se transforma y se reinterpreta con un sencillo cambio en los cojines, adornos y otros factores estacionales. El gris, el beige y el blanco se sitúan habitualmente en la base de una estancia con un look de transición. La madera es uno de los materiales que viste el hogar con diferentes estilos. Pues bien, también es un acabado característico de una estética transicional.
7. El valor de la mezcla y la experimentación
Es una propuesta que une la tradición con la modernidad. Por ello, es el binomio perfecto para quienes desean fusionar lo mejor de ambas corrientes. La experimentación es esencial para redescubrir las posibilidades del hogar por medio de diferentes colores, combinaciones y texturas. La mezcla es el ingrediente que se hace visible en el entorno. Por ello, un hogar con una estética transicional no está determinado por normas perfectamente establecidos. Puedes reinterpretar su esencia desde tu punto de vista.